En muchas ocasiones hablamos, en negativo, de los alimentos o productos que son perjudiciales para nuestros dientes. Pero también es necesario hablar de aquellos que son beneficiosos y saludables, en este caso para las encías. Un buen equilibrio entre higiene dental y comida saludable garantizará nuestra salud dental.

El cuidado de las encías

Las encías son una parte importantísima de la estructura dental. Son, para explicarlo de forma fácil y comprensible, los tejidos que mantienen adherido el diente al hueso. Si nuestras encías son débiles o están dañadas, esto puede derivar en patologías como la gingivitis y, en casos más avanzados, en algún tipo de periodontitis.

Por eso es importante cuidar nuestras encías, no sólo a través de una correcta higiene y las visitas preceptivas al odontólogo, sino también a través de pequeños gestos alimenticios que ayudan a hacerlas más fuertes. Dicho de otra forma, potenciar, en nuestra alimentación diaria, los alimentos que contengan antioxidantes y vitaminas. Veámoslo con más detalle.

Omega 3 

Seguro que habéis oído hablar del Omega 3. Se trata de un ácido graso, una de cuyas principales virtudes es reducir los niveles de inflamación. Lo que quizás no sabíais es que el cuerpo humano no lo puede generar de forma natural. Pero, afortunadamente, tenemos alternativas como el pescado azul (salmón, atún, sardina), las nueces, la soja, el rábano, la avena, el aguacate o las espinacas. Todos estos alimentos tienen una gran concentración de este ácido graso, que además tiene otras funciones beneficiosas para el cuerpo. 

Vitaminas C y D 

La vitamina C posee muchas particularidades positivas para el cuerpo. Y una es, precisamente, la de regeneración del colágeno de las encías, importante a la hora de mantener controladas las bacterias que pueden ser perjudiciales. Este tipo de vitamina se concentra, principalmente, en la fruta: fresas, arándanos, moras, frambuesas, naranjas, kiwis, uvas, pero también la encontramos en pimientos, patatas y boniatos, calabacín y cebollas, para poner sólo algunos ejemplos.

La vitamina D también tiene un componente esencial en el cuidado de nuestras encías. A ella se le atribuyen la absorción del calcio y del fósforo en nuestro organismo, componentes que hacen que las encías sean mucho más resistentes a cualquier tipo de infección. Encontraremos la vitamina D en los huevos, la mantequilla, la leche, en la mayoría de pescado azul y en el queso. Además, el sol (con medida) también nos aporta, a los seres humanos, una dosis extra de formación de esta vitamina.

Otros alimentos 

Aparte de lo que hemos listado hasta aquí, hay otros alimentos que también tienen un beneficio demostrado en la salud de las encías:

• Té verde. La catequina, que contiene el té verde, es un antioxidante que reduce las bacterias que se concentran en la zona dental.
• Tomate. Entre sus componentes se encuentra un antioxidante llamado licopeno, que tiene propiedades antiinflamatorias.
• Alimentos probióticos. El yogur natural (sin azúcar) contiene microorganismos naturales que aumentan la capacidad de defensa de las encías contra las agresiones bacteriológicas.

Así pues, vemos que una buena dieta concentrada en estos elementos incluye muchas ventajas para la salud de nuestras encías. Sin embargo, es preciso recordar, además, que una dieta equilibrada y variada siempre será beneficiosa para nuestro bienestar dental.