¿Tienes problemas a la hora de morder, oclusión, dientes apiñados o separados? La solución a todos estos problemas es la ortodoncia. Más conocido popularmente como aparatos, son una de las mejores opciones para corregir estas complicaciones bucodentales.

Cualquier momento es bueno para corregir los dientes, y no sólo por una cuestión puramente estética, sino también por una cuestión funcional y para evitar complicaciones más difíciles de resolver.

Lo primero que debes saber es que la ortodoncia ha evolucionado mucho en los últimos años y hay muchas opciones: según la edad del paciente, los problemas bucodentales que haya que solucionar, los tratamientos previos (por ejemplo: implantes o empastes dentales) y las preferencias personales. En Clínica Dental Oris, ante todo, te haremos un estudio personalizado para elegir el tratamiento que mejor se adapte a las necesidades de tus dientes. Si quieres más información sobre este tratamiento, en este post te dejaremos unas cuantas pinceladas.

¿Cuáles son los tipos de aparatos?

Hasta no hace muchos años, la única opción era llevar brackets metálicos, pero actualmente las opciones son mucho más amplias y estéticamente menos agresivas. Te las explicamos a continuación.

Ahora podemos corregir nuestra sonrisa sin que se note. Los brackets metálicos todavía constituyen una opción muy solicitada para corregir la posición de los dientes. Estos son fijos y van ligados al arco, por lo que sólo el odontólogo puede manipularlos. Este sistema optimiza el tiempo y corrige los problemas bucodentales más graves, aunque, estéticamente, son más agresivos. Además, es importante mantener una serie pautas muy estrictas respecto de la alimentación y la higiene.

Deshaciendo los mitos: los brackets no impiden comer ningún alimento, pero los duros y pegajosos pueden dañarlos con el tiempo. Además, estos aparatos tienden a retener la placa y los roces con la piel pueden generar llagas. Por eso es importante complementar el cepillado diario con otras técnicas de higiene como el colutorio y el irrigador bucal.

Los pacientes que deseen corregir los dientes, siempre que su problema lo permita, también pueden optar por tratamientos de ortodoncia estética. Estas opciones son las más solicitadas entre los pacientes adultos que quieren solucionar su problema con opciones menos invasivas estéticamente. Estas son algunas de las opciones:

• Ortodoncia invisible. Consiste en llevar fundas invisibles que se fabrican a medida para cada paciente y se van cambiando cada 15 días. La gran ventaja de este tratamiento, además de ser invisible, es que los aparatos se pueden retirar para comer y para la higiene bucodental. Por tanto, no suelen generar llagas. De todas formas, es muy importante mantener las fundas limpias para evitar la proliferación de bacterias.
• Brackets estéticos. Estos aparatos tienen las mismas características que los metálicos, pero los estéticos tienen un color similar al de las piezas dentales y pasan más desapercibidos. Tienes que saber que, con este tipo de aparato, hay que tener las mismas precauciones con la alimentación y la higiene que con los metálicos.

¿Y después de la ortodoncia, qué?

Esta es una de las grandes preguntas y de las grandes incógnitas. Retirar los aparatos no significa acabar con el tratamiento. De hecho comienza una fase fundamental: la retención. Los dientes tienden a volver a su posición inicial, lo que alteraría los resultados conseguidos con los aparatos dentales, y el tratamiento no debería servir de nada. Esta fase, pues, es clave.

Para evitar que se muevan, se colocan unos retenedores de ortodoncia al finalizar el tratamiento. Los retenedores tienen un papel fundamental para mantener los dientes a raya y que se queden en la misma posición.

En este sentido es fundamental seguir las indicaciones del especialista para garantizar el éxito de la ortodoncia y evitar el movimiento de las piezas dentales. Nuestro especialista te hará un estudio personalizado y el seguimiento exhaustivo de tu tratamiento.

Es imprescindible que cuando te quites los retenedores lo hagas con cuidado para evitar que se rompan y cuidar de su higiene cada vez que te los quites. Si sigues estas precauciones, se mantendrán intactos.

Si tienes alguna consulta o dudas específicas sobre el tratamiento de ortodoncia, consulta con nuestros profesionales. Estarán encantados de atenderte.